Chris McVeigh es un fotógrafo muy pero que muy particular. Su especialidad es fotografiar muñecos y figuras articuladas en las más variopintas situaciones con un derroche de imaginación y frescura realmente gratificante. Lo gracioso del caso es que algunas de sus obras son tan genialmente absurdas que muchos creían ver la mano de Photoshop en ellas y aquí es cuando Chris ha logrado arrancarme algo más que una sonrisa con el cómo se hizo de la imagen que les muestro a continuación…